Hola rodoadictos.
Si de verdad hay algo que me cabrea de verdad y que no entiendo que ocurra en pleno siglo XXI es que sea tan dificil acceder a pubs y bares para los discapacitados. Pocos (o mas bien ningun) pubs a los que he ido o tienen rampa o estan a ras de suelo, y no entiendo por qué.
Parece que los dueños de los pubs no quieran que discapacitados como yo entremos a sus locales, que nos consideren malos para su negocio. Y las zonas tampoco son las mas adecuadas, por ejemplo el barrio, sus calles estan empinadas en exceso de forma que una silla de ruedas es un peligro si se descontrola cuesta abajo, y el puerto esta mejor pero ni mucho menos es perfecto, el suelo está en dos alturas separadas por escaleras de forma que si quieres entrar a un sitio en mi situacion te ves obligado a bordear las escaleras hacia abajo por la zona mas concurrida de gente.
Vale que no es facil llevar un pub, que sin dinero no puedan acondicionar como es debido, pero hago un llamamiento para que aquellos sitios que puedan pongan una rampa en la puerta, no es tan dificil ni tan caro.
Rodad sin que nada os detenga.
sábado, 13 de marzo de 2010
miércoles, 10 de marzo de 2010
Segundas oportunidades
¡Hola rodoadictos/as!
En ocasiones, cuando revisamos nuestra vida por los recuerdos, recordamos a esa persona que tratamos fatal sin merecerselo y nos avergonzamos de lo idiotas que eramos de pequeño. Pero a veces la vida te da una segunda oportunidad de redimir todo el mal que le hicimos y tratarla todo lo bien que se merece, y esto te hace sentir bien.
A mi me ha pasado, a vuelto a mi vida una persona a la que traté fatal, y cada vez que me lo recordaban me sentía muy mal por ella y me ha sentado genial saber que está bien, que no me odia por lo que hice, y sobre todo pedirle perdon y darle todo el cariño que merece por mi parte.
Os doy un consejo, localizad a todos los que hayais tratado mal de pequeños sin merecerlo y pedidles perdon con un birra, os sentireis mucho mejor.
Rodad sin que nada os detenga.
En ocasiones, cuando revisamos nuestra vida por los recuerdos, recordamos a esa persona que tratamos fatal sin merecerselo y nos avergonzamos de lo idiotas que eramos de pequeño. Pero a veces la vida te da una segunda oportunidad de redimir todo el mal que le hicimos y tratarla todo lo bien que se merece, y esto te hace sentir bien.
A mi me ha pasado, a vuelto a mi vida una persona a la que traté fatal, y cada vez que me lo recordaban me sentía muy mal por ella y me ha sentado genial saber que está bien, que no me odia por lo que hice, y sobre todo pedirle perdon y darle todo el cariño que merece por mi parte.
Os doy un consejo, localizad a todos los que hayais tratado mal de pequeños sin merecerlo y pedidles perdon con un birra, os sentireis mucho mejor.
Rodad sin que nada os detenga.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)